Competencias digitales y resiliencia laboral

04/05/2024 - Reclutamiento de TI Recursos humanos

Renovación es la palabra que define al mercado laboral actual. Con justa razón, porque el trabajo se ha allegado a la tecnología y ha puesto en ella su operatividad. El trabajo mismo se ha transformado y la innovación tecnológica no parece detenerse; con el reciente impulso de la IA, la llamada cuarta revolución está a la vuelta de la esquina. ¿Cómo prepararnos para estar a la altura de un presente tecnológico?

El aumento de personas que usan Internet es acelerado, estadísticas de Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), indican que más de 65 % de la población mundial está en línea (ONU, 2023), y se desea llegar a la conectividad mundial. Ante esta celeridad, el mercado laboral se encuentra en camino hacia la digitalización, la automatización de procesos y el uso de IA, según el Informe El futuro del empleo 2023, estos cambios crearán “12 millones de puestos de trabajo más de los que desplazarán en todo el mundo de aquí a 2025”, pero bien podemos preguntarnos, ¿quiénes ocuparán esos puestos de trabajo y quiénes de las personas que han sido despedidas ocuparán esos lugares?

Estamos en un momento coyuntural, el sector laboral, la academia y la tecnología deben equilibrarse, no obstante, la rapidez del desarrollo tecnológico no va a la par de los otros ámbitos. Esto exige que el desarrollo profesional se mire desde otra óptica y sume a sus saberes la flexibilidad y las competencias que harán afrontar un presente digitalizado. En números del Informe El futuro del empleo 2023, se registrará un aumento de puestos de trabajo de analista de datos, especialista en macrodatos, especialistas en IA y aprendizaje automático, así como profesionales de la ciberseguridad (“30 % por término medio hasta 2027”). Sin embargo, las empresas consideran por encima de esta formación, el pensamiento analítico, seguido del pensamiento creativo. También se prevé un aumento de empleos verdes en sostenibilidad y protección ambiental, así como en el sector agrícola: operadores de maquinaria, calibradores y clasificadores.  En este contexto, ¿qué competencias hacen falta para estar a la vanguardia?

Competencias digitales

El término competencia ha acompañado a los planes educativos en las últimas décadas, al referirse a aquellos saberes que eran necesarios para hacer frente a la vida contemporánea: la lengua, la alfabetización, la aritmética y el uso de tecnologías de la información y la comunicación. A pesar de que este concepto fue referido desde los años setenta, recientemente se ha acordado su necesaria incorporación como un saber en sí mismo (conocimiento), un saber hacer (procedimental), y un saber ser (actitudinal). Llegar a estos conceptos fue un camino largo que no ha terminado de recorrerse. Foros internacionales como los organizados por la OCDE, la ONU, la UE, la CEPAL abonan a la definición de competencias digitales, pues también se habla de alfabetización digital. Los términos aluden a la importancia de incorporar los saberes respecto a las tecnologías de la información en la educación. Incluso, se han establecido políticas educativas que marcan los indicadores para medir el grado de competencia según el nivel escolar. Más allá de ello, el ámbito educativo no ha sido del todo satisfactorio ante el ritmo de avance tecnológico. De ahí que el sector empresarial considere que el “déficit en competencias y la incapacidad para captar talento son los principales obstáculos para la transformación (World Economic Forum, 2023).

Visto así, podemos entender las competencias digitales como las habilidades y las capacidades que ayudan en los procesos de digitalización empresarial, así como en la consecución de procesos tecnológicos en todos los niveles. Las hay “hard”: requieren conocimientos técnicos, y las “soft”: referidas a las maneras y los métodos para incluir las tecnologías en los entornos laborales. Si analizamos esta separación, nos podremos dar cuenta que a pesar de ser una concepción surgida en el entorno laboral, donde incluso están en tendencia las certificaciones, como camino posible, estamos aquí hablando también de un saber en sí mismo (conocimientos), de un saber hacer (es decir, operar tecnología), y saber ser (todas aquellas conductas y maneras de ser frente a la tecnología). Incluso, estamos hablando de un aprender a convivir, donde se incluyen, siguiendo la visión educativa, exigencias de la vida diaria y profesional en relación con las emociones.

El ámbito laboral

Se prevé que para 2027, 23 % de los puestos de trabajo cambien, ello en razón de la dinámica social y su apego tecnológico. Pero ¿qué necesitamos aprender en sí?

En relación con la IA, las empresas la están utilizando en área operativa, con aumento en la demanda de ingeniería de lenguaje natural, ciencia de los datos y aprendizaje automático. Las competencias digitales serán requeridas para controlar la calidad de IA,  editores de IA, así como ingeniería de prompts. La proporción de tareas completadas por máquinas será de 43% para 2027, en relación con las tareas completadas por humanos (57%).

Se requerirán competencias digitales en el área del e-commerce, en cuanto a uso de plataformas o programas, con competencias para incluir diversas formas de pago, uso de códigos QR, gestión de red comercial, creación de planes multicanal, logística, suministro, adaptación de la tienda a diversos dispositivos, estrategias de atención al cliente en línea, estrategias para captar usuarios, conocimiento de redes sociales, medición y planificación. En sí, deberán tomarse en cuenta habilidades para el marketing digital, donde también interviene la edición audiovisual y sonora.

Para la gestión de la información será necesario saber discriminar datos así como fuentes. Es necesario ser confiable, el pensamiento crítico que se requiere para buscar y seleccionar información de interés es crucial. En sí, estas competencias digitales están íntimamente relacionadas con habilidades que, según el Foro Económico Mundial, están en el top para 2025: pensamiento analítico e innovación; aprendizaje activo y estrategias de aprendizaje; resolución de problemas complejos;  pensamiento crítico; creatividad, originalidad e iniciativa; liderazgo e influencia social; monitoreo, control y uso de tecnología; diseño y programación tecnológica; resiliencia y flexibilidad; así como razonamiento e ideación. Y se espera que el tiempo para recapacitación en sectores distintos al de la salud, financiero, de energía y del consumo sea de 6 meses. Sin embargo, esta capacitación para 2020 se esperaba implementarse en las mismas empresas en un 39 %, en tanto, las plataformas de aprendizaje en línea en un 16 % y los consultores externos en un 11 %.

No obstante, en la actualidad, Incluso hay guías de selección de competencias en el mercado laboral y se han creado empresas que ofrecen capacitación en competencias digitales, las hay incluso que aplican test a empleados para determinar su nivel de competencia digital. Lo cierto es que el ámbito educativo no ha satisfecho el ritmo de desarrollo tecnológico, por ende, se ha habla también de microcredenciales. Estas vendrían a ser herramientas que se encargan de suplir los vacíos en el área laboral para capacitar a sectores desempleados o sin preparación profesional. Se han ideado certificaciones, dado que se ha puesto sobre la mesa la contratación basada en competencias. Y las microcredenciales son la herramienta que tanto personas con educación académica como aquellas sin formación, deben tener para despuntar en el ámbito laboral.

Las grandes innovaciones han surgido para fortalecer el mercado laboral. En la iniciativa privada se han extendido colaboraciones con el ámbito académico y se espera que la academia se flexibilice e integre nuevas formas de aprendizaje en la enseñanza tradicional. Ante este panorama, podemos afirmar que quienes ocupen los puestos de trabajo del futuro, serán aquellas personas cuya capacitación sea constante, que tengan competencias digitales, en el sentido más amplio, es decir, que estén a favor del uso de tecnologías, que tengan una actitud creativa y curiosa, y que estén dispuestas a sumergirse en el mundo que ya nos pisa los talones: el mundo digital. Ser resiliente será la pauta para poder hacer frente a los cambios en el sector laboral.

Referencias

ONU. (2023). Más del 75% de la población mundial tiene un teléfono celular y más del 65% usa el Internethttps://news.un.org/es/story/2023/12/1526712 

Ramos-Rojas, D., y Solano-Aguilar, G. (2016). El desarrollo de las competencias digitales desde la cronología institucional y educativahttps://rei.iteso.mx/bitstream/handle/11117/9020/Competencias%20digitales.pdf?sequence=2&isAllowed=y

World Economic Forum. (2020). Estas son las 10 principales habilidades laborales del futuro y el tiempo que lleva aprenderlashttps://es.weforum.org/agenda/2020/10/estas-son-las-10-principales-habilidades-laborales-del-futuro-y-el-tiempo-que-lleva-aprenderlas/

World Economic Forum. (2023). Informe sobre el futuro del empleo 2023https://www.weforum.org/publications/the-future-of-jobs-report-2023/